Tras cinco décadas de funcionamiento, el teleférico de la localidad Venezolana de Mérida, que asciende hasta los
Si por alguna razón tenían preparado realizar un viaje a Venezuela con la intención de acercarse a Mérida y al Parque Nacional de Sierra Nevada, no esperen poder subir a bordo del teleférico más alto del mundo, pues recientemente ha cerrado sus instalaciones por motivos de seguridad. El teleférico, construido en Mérida (Venezuela) por la compañía francesa Applevage en 1958 y reconstruido parcialmente por el gobierno venezolano a través de Corpoturismo en 1998, celebraría este año su 50 aniversario. El de Mérida es un sistema de cuatro teleféricos en serie que facilita un desplazamiento de
Tras 50 años de funcionamiento y algún que otro problema económico que llegó a poner en peligro la viabilidad de la instalación, el teleférico de Mérida ha cerrado definitivamente sus puertas. En Agosto de 2008, el experto suizo Hily Manz y un comité técnico del país alpino especializado en teleféricos y remontes en estaciones de esquí, realizaron una inspección general del sistema, en cuya investigación se determinó que los cables portadores de los vagones habían cumplido 50 años, es decir, han llegado al límite de su vida útil; de igual manera se descubrió que una de las torres del sistema padece de una fisura. Por las recomendaciones explícitas de este grupo de expertos europeos, el teleférico de Mérida se cerró a finales del verano para resguardar la seguridad de los usuarios. Este cierre pasó de ser temporal a definitivo cuando se evaluaron los costes de la reparación, que indicaron que la inversión sería tan grande, que quizás seria más rentable construir un nuevo teleférico capaz de ofrecer mayor capacidad y un mejor servicio a los usuarios.
El gobierno nacional espera ahora la evaluación final de los técnicos austriacos y suizos del grupo Doppelmayr-Garaventa para validar la información de Hily Manz y de ser así, el teleférico de Mérida podría volver a abrir sus puertas totalmente remodelado.
El teleférico de Mérida vio la luz tras presentarse un interesante proyecto ideado por los miembros del extinto Club Andino Venezolano en el año 1952 con el propósito de facilitar el ascenso a la Sierra Nevada de Mérida a turistas y venezolanos amantes de la montaña. Aquella idea un tanto descabellada, fue aprobada por el gobierno nacional y en el año 1955 se procedió al levantamiento topográfico que facilitaría el diseño del proyecto y su inmediata construcción. En diciembre de 1956 empezó a trazarse la ruta hacia las cumbres. El 8 de noviembre de 1957, el primer vagón de un rudimentario sistema de carga llegó a La Aguada, superando la barrera natural de los bosques nublados altiandinos.
Aunque la inauguración del teleférico estaba pautada dentro de los eventos con motivo del "Cuatricentenario" de la ciudad de Mérida, ésta nunca se dio de manera oficial porque el deceso de S.S. Pio XII opacó las celebraciones. Para mediados del
El Teleférico de carga, en sus tres primeros tramos, fue construido por la compañía alemana Heckel y, en su sección final, fue construido por la compañía suiza Habbeger. El director de la obra fue el especialista francés Maurice Comte. Junto a él, destacaron veteranos profesionales de Italia, como Giovanni Rizzi y el suizo Raymond Ruffieux. La totalidad de la fuerza laboral fueron obreros venezolanos, provenientes de los altos pueblos de Mérida. Entre los técnicos e ingenieros hubo un cúmulo de nacionalidades: españoles, italianos, franceses, alemanes, polacos, portugueses, yugoslavos, colombianos, ecuatorianos, argentinos, haitianos y venezolanos. Todos dieron lo mejor de sí para levantar la más grande obra de ingeniería sobre los Andes tropicales al norte de América del Sur.
La totalidad de la obra fue puesta en servicio al turista nacional y extranjero en marzo de 1960. La primera tarifa fue de 16 bolívares para adultos, 9 para estudiantes y 5 para niños. De manera regular, el Sistema ha sido actualizado tecnológicamente para asegurar su vigencia y calidad de servicio. Los sistemas de electricidad, electrónica y mecánica han recibido el beneficio de los adelantos de la tecnología computarizada, en apoyo a un excelente diseño vanguardista que sorprende por su resistencia y confort.
El teleférico parte de la estación de Barinitas en Mérida (
Cuando el dia está despejado y la meteorología acompaña, la vista desde la terraza del Pico Espejo es espectacular, con el Parque Nacional de Sierra Nevada a nuestros pies. Cuando neva son muchos los venezolanos que ascienden hasta la estación final del teleférico con la intención de pisar el blanco elemento, desconocido todavía para muchos, pues los glaciares del Pico Bolívar son los más cercanos al ecuador de todo América del Sur y se encuentran situados dentro del Parque Nacional de Sierra Nevada. Cuando el frio aprieta y la temperatura desciende por debajo de los 0 grados, resulta muy agradable degustar un buen vaso de vino caliente en la cumbre del Espejo, disfrutando del paisaje y la nieve. Antes de su cierre, subir y bajar los cuatro tramos del teleférico tenia un coste de 70 Bolívares para los adultos, 45 para los niños y 40 para los mayores de 60 años.
El Parque Nacional de Sierra Nevada fue creado el 2 de mayo de 1952 y abarcó en sus inicios una superficie de
Actualmente, el teleférico más alto del mundo se encuentra situado en Yunnan (China), en las "Jade Dragón Snow Mountains", que en su ultimo tramo alcanza los
Jekaterina Nikitina
Fuente: GEORGE DE LA SELVA / EL MUNDO DE LAS OBRAS CIVILES
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